16.12.10
15.12.10
14.12.10
13.12.10
12.12.10
8.12.10
Fiesta
4.12.10
Inés Saavedra
29.11.10
Carne de prócer
25.11.10
Carne preciosa
16.11.10
¡Última del Año, queridas vaquillonas!
5.11.10
1.11.10
31.10.10
Gracias
28.10.10
26.10.10
Rubio se arrima al fogón
24.10.10
Maruja Bustamante florece para Carne
18.10.10
Afluencia paraguaya
EVER ROMÁN. Periodista y escritor paraguayo residente en Buenos Aires. Ha trabajado en el periódico alternativo Yacaré y en comunicación alternativa en Paraguay. Actualmente es colaborador del periódico E´a. Su blog: www.barcoborracho1871.blogspot.com
*Humberto Bas, escritor paraguayo afincado en Neuquén, autor de El superpalo y La culeada y otros cuentos, entre otros. Dirige la editorial El Fracaso.
14.10.10
Sacudirse la modorra
En 1993 Miguel Briante firmó una nota titulada Una visión de mundo, donde enumeraba pecados y aciertos de los escritores jóvenes (Bizzio, Sánchez, Chejfec, Feiling, Caparrós, entre otros). Se ve que igual le costaba, que un poco se debatía entre el abrazo de bienvenida y el pase de factura: “El escepticismo en general –y esa distancia con el mundo de las pasiones, políticas o de las otras- es una de las constantes de los nuevos narradores”. Aunque a diferencia de otros adversarios, Briante fue un escritor leído y admirado, tanto sus relatos de Las hamacas voladoras y Ley de juego, como sus participaciones en Primera Plana, El Porteño y Página/12. La nota de Briante formaba parte de una polémica que hizo bastante ruido entre “nuevos” y “viejos” narradores. El debate era una especie de Boca-River: compromiso vs. frivolidad, arte vs. mercado, popular vs. elitista. Quizás hoy suene inútil y trillado, pero en aquellos años de posdictadura y puticlub menemista sí que encendía corazones. En 1995 Miguel Briante murió al caer de una escalera mientras hacía arreglos en la casa de su pueblo natal, General Belgrano. Se fue así sin despedirse, como si se hubiese ido a dormir una siesta. El jueves 28 de octubre, primavera de Carne Argentina, Hernán Ronsino llega para leer fragmentos de Kincón y sacudirlo de la modorra. La invitación es esta: Ronsino lee a Briante mientras todos nos echamos bajo la parra recién florecida a escucharlos.
13.10.10
Picnic
26.9.10
14.9.10
Susana x María Inés
6.9.10
Néstor x Mariano
2.9.10
Emma x Andi & Juan
Escucharla y verla en la entrevista que María Moreno (la divine Moreno) le hizo para el extinto Canal de la Ciudad, era una sorpresa que había que contener para no perderse ni un solo gesto, ni una sola palabra. Leer Habitaciones – Ed. Catálogos, 2002-, crónica de un amor que atraviesa gran parte de su vida, también fue un placer inmenso y alegre y lo que siguió en la lectura es un ensayito extraño sobre la relación entre Mastronardi y Gombrowicz. En 2009, Ediciones del Copista publicó sus Poesías completas (así, en plural), una hermosa compilación de sus poemas, que hay que agradecer como un gesto de verdadera responsabilidad y osadía editorial. Sin embargo, leer en alto y frente al público a Emma Barrandéguy no es sencillo. Sus poemas tienden a ser una enunciación íntima, aun cuando son clarísimos estandartes parecen hablarle a la oreja de alguien que siempre está próximo, armarse en el trayecto ínfimo entre quienes están reunidos puertas adentro. Y ahí está una de las cuestiones esenciales de las lecturas que organizamos, la posibilidad de escuchar como nuevos a autores que conocemos de antemano. Eso pasó en la noche de Carne Argentina habla con los muertos, cuando despuntaba la lectura, mientras Andi Nachon y Juan Fernando García, con evidente amor por la poeta, se metían en esa otra Gualeguay que es la Barrandéguy. Después de eso, uno se quedó con la necesidad de volver a sus libros, a releerla a la luz de un acercamiento distinto, reposado y con acentos que se desconocían. Vivo y coleando, ahí está, tan mágico otra vez, el rito de nuestras lecturas. Gracias a Andi y a Juan, por traerla con tanta sensibilidad para nosotros, tan viva, tan hermosa y única: Emma Barrandéguy.